jueves, 10 de abril de 2014

VISIONES III

Todos escogen su propio infierno: manicomios, prisiones, hospitales, fábricas, corporativos, oficinas, tribunas; mismo infierno, diferente ornamento. Mira fijamente el radiante destello en los ojos de tu hermano cuando oprimas el gatillo. Rojo. Una parcela de percutores. Los cañones mimando tu sien. Cien sienes. Los egos como pirañas caníbales nadando en su caldito de ácido nítrico. Filtrando, respirando el plomo en el oxígeno. Branquias con bronquitis. Hasta que todos los valores expiraron. Una libertad despejada de toda culpa brilló en cada corazón. Todos recién nacidos. Bebitos lindos. Todos fueron demasiado tímidos como para dirigirse la palabra. Todos fueron muchísimo más de lo que pudieron aparentar. Todos fueron carcomidos lentamente por una saludable envidia. Los hígados enfermaron del más inhumano de los sentimientos más humanos. Nos volvimos misóginos. Creamos Dioses y metanfetamina. Besos y retretes. Humanidad ocre. El sueño terminó.

No hay comentarios:

Publicar un comentario